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Micromanagement: Qué es y cómo evitarlo en tu empresa

Micromanagement: Qué es y cómo evitarlo en tu empresa

Imagina que estás en el trabajo y tu jefe se involucra en cada pequeño detalle de lo que haces: revisa cada correo antes de que lo envíes, cuestiona cada decisión que tomas y se asegura de que sigas sus instrucciones al pie de la letra. Esto puede parecer útil al principio, pero con el tiempo, puede llegar a ser frustrante. Esta práctica se conoce como micromanagement, y es algo que puede afectar negativamente tanto a los empleados como al ambiente laboral.

Por lo tanto, va a ser fundamental conocer y detallar el alcance de los supervisores en las tareas de los empleados ya que esta práctica puede incurrir en errores y en desmotivación del personal.

A continuación, profundizamos en que es el micromanagement y de qué modo o forma evitarlo en tu organización.

¿Qué es el micromanagement?

El micromanagement es un estilo de liderazgo en el que un supervisor se involucra excesivamente en los detalles y procesos de las tareas de sus empleados.

Este tipo de gestión puede afectar negativamente la moral del equipo, reducir la productividad y limitar la creatividad, al restringir la autonomía de los trabajadores. Investigaciones indican que el micromanagement puede incrementar el estrés laboral en un 35% y disminuir la satisfacción en un 40%. Por ello, es esencial equilibrar la supervisión con la autonomía para mantener un ambiente laboral saludable y eficiente.

 

Micromanagement vs macromanagemt

Estos estilos son dos estilos de gestión que representan extremos opuestos en la forma en que los líderes supervisan a sus equipos.

El micromanagement implica una supervisión excesiva y detallada de cada aspecto del trabajo de los empleados. El líder que practica el micromanagement se involucra en cada pequeño detalle y toma decisiones minuciosas en lugar de permitir que los empleados gestionen sus tareas de manera autónoma. Busca que el trabajo se realice exactamente del mismo modo que él lo haría. No deja lugar a la autonomía y mucho menos a la creatividad o la innovación.

Por otro lado, el macromanagement es un estilo de gestión en el que el líder se enfoca en los aspectos generales y estratégicos del trabajo, delegando la toma de decisiones y la gestión de los detalles a los empleados. El líder confía en que su equipo tiene la capacidad para manejar los pormenores y toma un papel más orientado a la visión y el apoyo general. Este tipo de liderazgo fomenta el compromiso y la innovación.

En definitiva, el primero se enfoca al cómo se ejecuta el trabajo, prestando detalle a cada tarea dentro del proceso, mientras que el segundo se enfoca en los resultados, dejando libertad en el modo de llegar a ellos.

 

Ejemplos de micromanagement

Es muy probable que te hayas encontrado en alguna ocasión con un manager que quiere tenerlo todo controlado: dedica la mayor parte de su tiempo a revisar el trabajo de su equipo, que da instrucciones precisas del modo en el que se debe de realizar cada tarea y exige que se le consulte cualquier cuestión sobre la que haya que decidir, con independencia de su transcendencia.

Todo ello da lugar a situaciones de micromanagement en diferentes ámbitos del trabajo como las siguientes:

  • Aprobación de documentos: Revisión de todos los documentos antes de que se envíen, incluyendo correos electrónicos, informes y presentaciones.
  • Revisión de proyectos: Control de cada decisión y cambio en los proyectos, desde ajustes en los diseños hasta detalles en los planes de trabajo, sin dejar que los empleados tomen decisiones por sí mismos.
  • Control de horarios: Supervisión exhaustiva de los horarios de entrada y salida de los empleados, sin considerar la posibilidad de horarios flexibles.
  • Intervención en tareas diarias: Intervención directa en detalles de las tareas diarias, como la organización del espacio de trabajo y la forma de realizar los procedimientos estándar.
  • Aprobación de cambios menores: No permitir pequeños ajustes en los procesos y herramientas que usa el equipo.
  • Control de comunicación: Revisión de todos los mensajes y comunicados que se envían a trabajadores, clientes o socios antes de que salgan, limitando la libertad de los empleados para comunicarse.
  • Supervisión de decisiones creativas: Supervisión de cada modificación relacionada con aspectos creativos tales como colores o tipografías.
  • Intervención en procesos de producción: Revisión de cada detalle del proceso y realización de ajustes continuos en el mismo.
  • Control de métodos de trabajo: Imposición de procedimientos específicos y detallados, sin considerar métodos alternativos que podrían ser más efectivos.

 

¿Cuáles son los efectos negativos del micromanagement en una empresa?

El micromanagement puede tener varios efectos negativos en el entorno laboral.

Primero, puede reducir la moral de los empleados, quienes se sienten desmotivados y desalentados cuando perciben que no se confía en sus habilidades y decisiones. Esta falta de confianza puede llevar a una disminución en la satisfacción laboral y en el compromiso con el trabajo.

Además, la productividad puede verse afectada, ya que la supervisión excesiva y la necesidad constante de obtener aprobación retrasan el progreso. Los empleados dedican más tiempo a esperar la revisión de su jefe en lugar de enfocarse en completar sus tareas. Esta situación también limita la innovación, ya que los empleados, al no tener la libertad para tomar decisiones y experimentar, ven restringida su creatividad y capacidad para encontrar nuevas soluciones.

El desarrollo profesional también puede ser impactado negativamente. La falta de autonomía impide que los empleados desarrollen nuevas habilidades y aprendan de sus propios errores, afectando su crecimiento profesional y su capacidad para asumir roles de mayor responsabilidad. El estrés y la tensión en el lugar de trabajo también pueden aumentar debido a la presión constante para cumplir con expectativas muy específicas, lo que afecta la salud mental y el bienestar general de los empleados.

Además, la falta de confianza en las capacidades del equipo puede llevar a una erosión en las relaciones laborales y a una pérdida de confianza entre el jefe y los empleados. La dependencia excesiva de las decisiones y aprobaciones del micromanager puede dificultar la toma de decisiones autónomas y la resolución de problemas sin la intervención constante del jefe.

La gestión del tiempo también se ve afectada, ya que el tiempo dedicado a revisar y aprobar cada pequeño detalle puede ser excesivo. Esta ineficiencia en la gestión del tiempo impacta tanto al micromanager como a los empleados. La desmotivación generalizada del equipo y la percepción de que sus habilidades no son valoradas pueden llevar a una mayor rotación de personal, lo que resulta costoso para la empresa en términos de reclutamiento y capacitación de nuevos empleados.

En conjunto, estos efectos muestran cómo el micromanagement puede ser perjudicial tanto para los empleados como para la organización en su totalidad.

 

Consejos para evitar el micromanagement

Para prevenir el micromanagement en nuestra organización, el primer paso es concienciar y formar al equipo de dirección y mandos medios, acerca de los pros y contras de cada estilo de liderazgo y acompañarles en el desarrollo de las habilidades y competencias necesarias para el desarrollo de un liderazgo más enfocado a resultados, que permita basado en la confianza y el empoderamiento del equipo. Por otro lado, estos manager deben de ser ejemplo del modelo de autonomía y responsabilidad que se pretende desarrollar.

Además, será necesario:

  • Establecer expectativas claras y definidas para cada tarea o proyecto, asegurándote de que todos entiendan el propósito y el impacto de su trabajo.
  • Proporcionar las herramientas y recursos necesarios, como software y capacitación, para que puedan desempeñar su trabajo eficazmente.
  • Fomentar la autonomía permitiendo que el equipo tome decisiones dentro de sus áreas de responsabilidad.
  • Mantener una comunicación abierta y accesible, animando a plantear preguntas y compartir actualizaciones sin imponer un control excesivo.
  • Confía en las habilidades del equipo permitiéndoles asumir responsabilidades y resolver problemas de forma independiente.
  • Reconocer los éxitos del equipo.
  • Tolerar el error, asumiendo que este es parte fundamental para el aprendizaje.
  • Utiliza sistemas de seguimiento, como informes periódicos o herramientas de gestión de proyectos, para que puedan informar sobre el progreso sin supervisión constante.
  • Ofrecer retroalimentación constructiva regularmente, enfocándote en mejoras y ajustes necesarios. Respeta su tiempo permitiendo momentos de concentración sin interrupciones y evita solicitudes excesivas que interrumpan su flujo de trabajo.
  • Apoyar el desarrollo profesional del equipo para mejorar su desempeño y reducir la necesidad de supervisión constante.

 

¿Cómo pueden las herramientas digitales evitar el micromanaging?

Las herramientas digitales evitan el micromanagement al ofrecer formas efectivas de supervisar el trabajo sin intervención constante.

Plataformas para la gestión de proyectos y tareas permiten seguir el avance y coordinar el trabajo sin necesidad de supervisar cada detalle personalmente. Las herramientas de comunicación y colaboración facilitan la interacción y resolución de problemas entre los miembros del equipo, reduciendo la necesidad de supervisión directa.

Asimismo, los sistemas de seguimiento de tiempo y análisis proporcionan datos sobre cómo se está utilizando el tiempo y el rendimiento general, permitiendo una gestión basada en información en lugar de observaciones constantes. La automatización de tareas repetitivas libera a los empleados de actividades tediosas y reduce la necesidad de control minucioso. Los mecanismos para dar y recibir feedback permiten evaluar el desempeño de manera estructurada sin la necesidad de una supervisión continua. Finalmente, los sistemas de gestión del conocimiento aseguran que la información y los procedimientos estén accesibles para todos, lo que ayuda a los empleados a resolver problemas de manera independiente y disminuye la necesidad de intervención constante.

¿Cómo puede ayudar Factorial en el micromanagement?

Factorial pone a disposición de la organización y de sus managers distintas herramientas que favorecen el trabajo colaborativo y la comunicación, tanto para equipos que trabajan de forma presencial como en un modelo hibrido o remoto. Entre ellas:

  • Ofrece una solución integral para la gestión de flujos de trabajo dentro de las organizaciones. Con esta herramienta, es posible crear y personalizar distintos procesos operativos, adaptados a las necesidades específicas de cada equipo o departamento. Permite la asignación eficiente de tareas a los miembros del equipo, proporcionando una plataforma para el seguimiento detallado de cada actividad en tiempo real.
  • El modulo de gestión de proyectos permite planificar y asignar tareas a cada miembro del equipo, así como dar visibilidad a todos los implicados del estado de cada una de ellas.
  • Permite el diseño y asignación de distintos horarios y turnos, y la supervisión de su cumplimiento a través del control horario, desde el que podemos activar la geolocalización.
  • Los manager y los equipos tienen la posibilidad de compartir sus calendarios de ausencias.
  • La dirección y los managers disponen tanto de indicadores individuales acerca de la actividad de cada persona, como globales, sobre rentabilidad, productividad, absentismo, etc, de cada equipo y de la compañía en general.
  • Ofrece la posibilidad de compartir comunicaciones a comunidades con distinto alcance, y recibir feedback acerca de las mismas. Esta funcionalidad es especialmente útil para informar sobre logros o novedades globales de la compañía, nuevas incorporaciones o información de interés para todos.
  • A través del módulo de performance, managers y equipo dan y reciben información detallada sobre funciones, responsabilidades, alcance y objetivos de cada puesto y persona, así como el nivel de desempeño de esta.

 

En definitiva, se trata de una herramienta ágil e intuitiva que conecta a las personas del equipo con la organización y sus managers, permitiendo una comunicación e interacción más fluida y ordenada.

 

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Desde Inforges Desarrollo de personas podemos ayudarte a desarrollar en tu organización una cultura de confianza y un liderazgo enfocado el empoderamiento de las personas, permitiendo que cada una de ellas desarrolle al máximo su potencial, manteniendo su motivación y engagment con la organización.

Somos expertos en coaching directivo y en la formación y desarrollo de las habilidades para un liderazgo transaccional, que adapta sus estrategias a las necesidades de cada equipo, persona o situación.

Además, podemos ayudarte a implantar herramientas que te faciliten el seguimiento del desempeño de los equipos, así como la comunicación con y entre los mismos.

 

Preguntas frecuentes sobre el micromanagement:

A continuación, resolveremos algunas dudas frecuentes sobre micromanagement:

¿Cómo es un micromanager?

Un micromanager controla cada detalle del trabajo de su equipo, mostrando desconfianza en sus capacidades y decisiones. Tiende a supervisar de cerca y a imponer instrucciones precisas, limitando la autonomía y la creatividad de los miembros del equipo.

¿Por qué evitar el micromanaging en el liderazgo?

Fomenta la autonomía y la confianza, permitiendo que los miembros del equipo tomen decisiones y se sientan más comprometidos con su trabajo. Esto mejora la eficiencia y la moral del equipo, ya que se reduce la frustración y se estimula la innovación y el crecimiento profesional.

¿Qué es lo contrario al micromanagement?

Macromanagement que consiste en que el equipo tome decisiones y gestione sus responsabilidades de forma autónoma. Este enfoque fomenta la autonomía y el empoderamiento, permitiendo que los miembros del equipo utilicen sus habilidades y creatividad sin una supervisión excesiva.

¿Cómo puedo trabajar en las habilidades de comunicación para convertirme en un buen líder?

Hay que enfocarse en escuchar activamente y entender las necesidades y perspectivas de tu equipo. Además, practica la claridad y la concisión al transmitir tus ideas y expectativas para evitar malentendidos y fortalecer la confianza.

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