Los sistemas de gestión de almacenes, SGA, se han convertido en el elemento diferenciador entre las empresas que gestionan adecuadamente su almacén y las que no, pero el SGA sigue siendo un gran desconocido en el entorno de la PYME.
Los modelos de comercialización están cambiando.
Las empresas con modelos de venta tradicionales están dando un giro hacia el mundo digital para intentar no perder la estela de las grandes firmas de comercio electrónico. Según los últimos datos la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia el e-commerce está experimentando un incremento continuado del 20%.
En este nuevo escenario, los plazos de entrega son cada vez más cortos, han pasado de semanas a días, e incluso a horas, y el margen al error tiene, cada vez, menos cabida. Una entrega errónea es una mala experiencia para el usuario y puede suponer una gran pérdida de negocio.
Estas nuevas reglas de mercado afectan tanto al negocio a particulares como entre empresas, y una buena gestión de almacén es un punto clave.
SGA: La logística en este nuevo entorno juega un papel fundamental.
Cuando la empresa quiere mejorar la gestión del almacén se embarca en proyectos de desarrollo sobre sus ERP, “parches” cuando los comparamos con un sistema especializado como un SGA.
Los sistemas de gestión de almacenes, SGA, se han convertido en el elemento diferenciador entre las empresas que gestionan adecuadamente su almacén y las que no, convirtiéndose en un complemento perfecto para tu ERP.
¿Qué podrás hacer con un SGA?
Con un SGA podrás gestionar de un modo eficiente todos los recursos y operaciones del almacén:
- Reglas de ubicación, permitiendo un mayor aprovechamiento del espacio; Los contenedores usados y las ubicaciones del almacén son gestionadas por la aplicación con criterios de eficiencia y optimización.
- Control de stock, caducidades, incompatibilidades de productos, peligrosidad, temperatura, etc.
- Automatización de operaciones: reposición automática de ubicaciones y expedición de pedidos tras el registro de una entrada (cross-doking).
- Control de los equipamientos y operarios del almacén: toda la actividad queda recogida y se pueden establecer métricas para conseguir la mejora.
- Ruta de preparación: los movimientos dentro del almacén se articulan siguiendo la definición de la ruta más óptima.
- Reglas para la salida de mercancía: que atienden al tipo de producto y criterios de eficiencia
¡En definitiva, un SGA aportará valor a tu ERP!